Geografía de la República Dominicana: cordilleras y sierras.
La República Dominicana limita al norte con el Océano
Atlántico a lo largo de 586 km, al sur con el Mar Caribe en una distancia de
545 km, al oeste con Haití en 276 km de frontera y al este con el Canal de la
Mona, reparándola de la isla de Puerto Rico. Ocupa el 74% del territorio de La
Española, la cual comparte con el vecino país de Haití.
El país tiene tres sistemas montañosos principales: la
Cordillera Central, atravesando toda la zona central y muere en la parte sur
(San Cristóbal), en este sistema montañoso está ubicado el pico más alto de las
Antillas, el Pico Duarte (3.087 m de altura); la Cordillera Septentrional, que
corre paralela a la Central separando el Valle del Cibao de la Llanura Costera
del Atlántico, siendo el pico Diego de Ocampo el más alto de sus elevaciones; y
la Cordillera Oriental, la más corta y la de menor altura de las tres, en la
zona este de la isla. Otras cadenas montañosas de importancia son las sierras
de Bahoruco y de Neyba, en la región Suroeste. Se puede decir que la geografía
se compone de agrestes montañas y fértiles valles entremezclados. El punto más
bajo del país se encuentra en el Lago Enriquillo, a unos 46 m bajo el nivel del
mar.
cordilleras y sierras
Cordillera Central
La Cordillera Central es una tierra del periodo Cretáceo. En
su origen fue una cadena de volcanes. Esta cordillera se proyecta en el mapa en
dirección Noroeste-Sudeste. Partiendo de la Península de San Nicolás, en Haití,
se extiende en territorio dominicano desde Restauración y Loma de Cabrera hasta
las inmediaciones de Bani y San Cristóbal.
La Cordillera Central alcanza su culminación en el pico
Duarte, con 3.087 metros. Le siguen en orden de menor categoría La Pelona, con
3.085 m; La Rusilla, con 3.029 m; Monte Mijo, 2.200 m; y Monte Tina, 2.059 m.
Un hecho geográfico bastante desconocido es que el eje
principal de la Cordillera Central pasa al Norte de Restauración y Constanza.
Estas dos poblaciones, aunque políticamente pertenecen a las provincias del
Cibao, geográficamente están ubicadas en la vertiente Sur de la Cordillera
Central.
Respecto a la orientación de la Cordillera Central hay
opiniones contradictorias. Para algunos geógrafos esta cordillera se extiende
en la dirección Este-Oeste, desde cabo Engaño hasta la frontera. Para otros, su
orientación es Noroeste-Sudoeste, y prefieren llamarla Cordillera Oriental o
del El Seibo, al ramal de la Cordillera Central que se extiende hacia el Este.
Cordillera
Septentrional
Esta cordillera es conocida también como Sierra de
Montecristi. Se extiende en dirección Noroeste-Sudeste desde la vecindades de
la ciudad de Montecristi hasta un poco más al Este de las Aldeas de Arenoso y
Rincón Molenillos, en Villa Riva.
Esta cordillera está separada de la de Samaná por una franja
pantanosa de unos 12 kilómetros de ancho, conocida con el nombre de Pantanos
del Gran Estero. La Cordillera Septentrional es relativamente joven. Todas, o
casi todas sus formaciones geológicas datan del Terciario, o sea de 1 a 60
millones de años.
Al iniciarse cerca de Montecristi, comienza en una serie de
colinas bajas, que van ascendiendo a medida que se avanza hacia el Este.
Primero aparece el pico Murazo o Jicome, frente a la población de Esperanza y
al central azucarero de esa población.
La cordillera
Oriental
Se localiza en la región este de República Dominicana. A
este conjunto de sierras se le denomina también Sierra de El Seibo, siendo más
corta y de menor altura que la Cordillera Central y Cordillera Septentrional.
Se extiende en dirección oeste-este, desde Cotuí, en la provincia Sánchez
Ramírez, hasta la provincia La Altagracia, atravesando las provincias Monte
Plata, Hato Mayor y El Seibo. La Cordillera Oriental bordea al norte los Llanos
Costeros de Sabana de la Mar y Miches, y al sur el Llano Costero Suroriental o
del Caribe.
Sierra de Yamasá
El ramal de la Cordillera Central que se dirige al Este no
debe ser considerado en toda su extensión como formando parte de la Cordillera
Oriental. En la bifurcación hacia el este de la Cordillera Central aparece la
Sierra de Yamasá, que culmina en la loma de Siete picos o Siete Cabezas, con
853 m.
Esta Sierra de Yamasá es, al igual que toda la Cordillera
Central, muy antigua, y se compone de rocas del periodo Cretáceo. Pero debido a
las lluvias intensas que caen en esta región montañosa, así como las elevadas
temperaturas del trópico, las rocas madres se han desintegrado.
Sierra del Seibo
Así se llama al conjunto de sierras que corren en la
dirección Oeste-Este, desde Cotuí hasta más allá de Higuey. En su extremo occidental,
o sea, de Cotuí hacia el Este, la Sierra de El Seibo es de topografía cársica,
nombre que viene de su parecido con una región oriental del mar Adriático, en
Europa.
Esta región, llamada Los Haitises, es escabrosa y difícil de
habitar. En Los Haitises las lluvias son muy abundantes, pero no se observan
ríos en la superficie. El drenaje se efectúa en forma subterránea. Las lluvias,
al disolver la roca caliza, han realizado un fuerte trabajo de erosión interna.
Esta región cársica la hemos incluido como formando parte de
la Cordillera Oriental. En verdad se diferencian tanto por su edad como
topografía. Los Haitises son de formación miocena, mientras que la Sierra de El
Seibo o Cordillera Oriental es cretácea.
En la Sierra de El Seibo hay bastante ocupación humana. Las
lluvias son abundantes y el terreno está dedicado a la crianza de ganado
vacuno, principalmente en las vertientes Sur y Este.
Sierra de Samaná
Casi todas las rocas son metamórficas. El mármol es
abundante. Casi toda la península está formada de este mineral, y todo el que
se industrializa en el país es extraído de Samaná.
El relieve de la cordillera no es escarpado. Únicamente hay
dos montañas de 500 metros o más. Son Pan de Azúcar, 493 m., y el Monte Mesa,
de 606 metros. Samaná es la tierra dominicana que mayormente ha sufrido los
efectos de movimientos sísmicos.
Sierra de Bahoruco
Esta sierra representa el extremo Este de la cordillera
sumergida que parte de América Central, pasa por Jamaica, cruza el canal del
viento y emerge en Haití. Ya en La Española corre a todo lo largo de la
península del Tiburón y llega a la República Dominicana, donde toma el nombre
"Bahoruco".
Esta sierra es abrupta y difícil de poblar. En sentido
general encontramos montañas de más de 2,000 m. de altura. La mayor es el
Aguacate, que alcanza 2,100 m. y se localiza en la misma línea fronteriza.
La sierra de Bahoruco es rica en minerales. En la ladera
Norte están los grandes depósitos de sal y yeso. En la ladera Sur de esta
sierra hay profundas capas de tierras rojas, ricas en alúmina de donde se
extrae la bauxita.
Lo más impresionante desde el punto de vista de relieve, es
una serie de terrazas de origen marino que parte de la costa, cerca de Cabo
Falso, hasta alcanzar la sierra. Algunas de estas terrazas se encuentran a más
de 300 metros de altura, según O. Cucurullo.
Sierra de Neiba
Esta sierra está separada de la Cordillera Central por el
Valle de San Juan, y separada de la Sierra de Bahoruco por el valle de Neiba.
Su extensión en territorio dominicano es de unos 100 kilómetros
aproximadamente. En Haití se continúa en las sierras de Trou de Eau.
Como casi todas las sierras y cordilleras dominicanas, su
orientación es de Noroeste-Sudeste, pero en su extremo oriental hace un viraje
hacia el Sur y forma la Sierra de Martin García, que se hunde en el Mar Caribe.
En el relieve de la Sierra de Neiba se observan fenómenos
cársicos, los que originan un drenaje subterráneo. Igualmente, cuando se mira
esta sierra desde el lado Sur del valle de Neiba, se descubren conos de
deyección, o sea, acumulaciones de materiales aluvionales y escombros que han
bajado de la sierra desde edades muy remotas.
Su mayor altura es el Monte Neiba, con 2.260 m, que se
localiza en el mismo punto de división de las provincias independencia,
Baoruco, San Rafael, y San Juan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario